Las clematis son plantas trepadoras muy vistosas y fáciles de cuidar. Para plantarlas, es importante escoger la época adecuada del año y el sustrato idóneo.
¿Cuándo se plantan las clematis?
La primavera y el otoño son las mejores épocas para plantar las clemátides, cuando el tiempo es cálido pero no en exceso y la tierra mantiene durante más tiempo la humedad. En climas frescos es posible hacerlo en verano, pero deberás asegurarte de regarlas con mucha frecuencia.
¿Cómo se deben plantar las clematis?
Antes de plantar las clematis, prepara la tierra del lugar donde las vas a sembrar. Debe estar bien aflojada y libre de malas hierbas. Crea un drenaje en el fondo del hoyo de plantación utilizando grava, gravilla o fragmentos de arcilla. Mezcla la tierra excavada con composta, paja o mantillo de hojas para enriquecerla con nutrientes y humedad. Al momento de plantarlas, asegúrate de hacerlo con una ligera inclinación en la dirección de la guía y 7 a 10 centímetros más profundo de su colocación en el contenedor.
¿Cómo se pueden propagar las clematis?
Las clematis pueden propagarse por acodos y esquejes. Si quieres propagar clematis por esquejes corta una rama de la planta con una longitud de 12-15 centímetros. Deshoja el esqueje y deja solo una hoja, sumerge la parte inferior en polvo de enraizamiento, llénalo en una maceta pequeña de unos 8-10 cm de lado o diámetro con sustrato fresco, magro y húmedo para plantar un esqueje a la vez.
Coloca una bolsa de plástico sobre los esquejes para conservar la humedad y ponlos en un lugar a media sombra y a una temperatura de entre 15 y 21 grados centígrados, es decir, ni mucho calor ni mucho frío. En un plazo de 6 a 8 semanas, los esquejes enraizarán y estarán listos para ser plantados.
Consejos para el cuidado de las clematis en macetas
Las clematis son una planta trepadora de la familia Ranunculaceae, con más de 400 cultivares en su haber. Una de las ventajas de esta planta es que se adapta muy bien a ser plantada en macetas, lo que permite que pueda ser ubicada en cualquier espacio del jardín. Para su correcto crecimiento, es importante seguir algunos cuidados que detallamos a continuación.
Ubicación para la clematis
La clematis debe ser ubicada en un lugar donde reciba una buena cantidad de luz solar, pero evitando la exposición directa al sol en zonas cálidas. En caso de ser plantada en maceta, es recomendable que esta tenga un diámetro de al menos 50 cm, y que se disponga de un soporte donde la planta pueda trepar. También es importante que la clematis sea regada regularmente y que se realice el cambio de maceta cada 2 o 3 años.
Riego de la clematis
El riego es uno de los cuidados más importantes para el correcto crecimiento de la clematis. Es necesario que la tierra se mantenga húmeda pero nunca encharcada. La cantidad de agua necesaria dependerá del tamaño de la maceta y de la época del año, por lo que se recomienda regar con mayor frecuencia en verano y reducir la cantidad de agua en invierno.
Tierra o sustrato para la clematis
La tierra o sustrato es fundamental para el correcto desarrollo de la clematis. Es recomendable utilizar una tierra rica en nutrientes y con un buen drenaje para evitar la acumulación de agua. Es posible añadir humus de lombriz o turba rubia para mejorar la calidad del sustrato. Además, se puede agregar una capa de piedras o grava en la base de la maceta para facilitar el drenaje.
Abono para la clematis
El abono es otro factor importante para el correcto crecimiento de la clematis. Es recomendable abonar la planta con un fertilizante rico en potasio y fósforo cada 15 días durante la época de crecimiento (primavera y verano). También es posible utilizar abono orgánico como compost o estiércol de vaca, que se puede aplicar en otoño y primavera para mejorar la calidad de la tierra. Sin embargo, es importante no abonar en exceso, ya que esto puede ser perjudicial para la planta.
Cómo podar las clematis en primavera
La clemátide es una planta trepadora muy popular en jardines y hogares por su belleza y color. Para mantenerla saludable y con una floración abundante, es necesario realizar una poda adecuada. Además de ayudarla a florecer, la poda permite que la planta produzca más brotes desde abajo y se vuelva más alta y tupida.
Variedades de clematis
Es importante conocer las variedades de clemátide y su ciclo de floración para saber cuándo se deben podar. Las variedades que florecen en primavera, como C. alpina, C. montana y C. armandii, deben podarse después de la floración ya que forman sus capullos en madera vieja. Las clemátides que florecen repetidamente también se deben podar después de cada floración.
Momento de poda y técnicas
El momento de poda está determinado por el ciclo de floración de la planta. En el caso de las clemátides de floración temprana, solo se necesita una poda ligera. En cambio, en las clemátides de floración tardía, es necesario recortarlas casi hasta el nivel del suelo. Es importante utilizar herramientas adecuadas como tijeras de podar o de jardín para recortar los tallos dañados o aislados que se encuentren.
Ciclos de floración y entidades relevantes
Cada variedad de clemátide tiene un ciclo de floración diferente que debe ser tenido en cuenta para una poda adecuada. Algunas entidades relevantes de la clemátide incluyen el Espíritu Polaco, la Duquesa de Albania, C. henryi y Nelly Moser. Con el conocimiento adecuado del ciclo de floración de la clemátide y su variedad, una poda adecuada puede mantener la salud y belleza de la planta.
Cómo proteger las clematis del frío en invierno
Las clematis, en especial la especie Clematis florida, son plantas muy apreciadas en jardinería por su belleza y variedad de colores. Para mantenerlas saludables, es necesario prestar atención a sus cuidados, en especial durante el invierno.
Uno de los principales cuidados de la Clematis florida es la protección contra el frío en invierno. Durante los meses más fríos, estas plantas necesitan cierto grado de frío para mantenerse en letargo hasta que llegue el momento de brotar. Sin embargo, si brotan demasiado pronto, antes de que pase el peligro de la última helada, puede ser fatal para la planta, especialmente si ya ha crecido antes de la llegada del frío.
Para proteger la Clematis florida del frío en invierno, lo ideal es mantener las temperaturas por debajo de los 0°C. Si las temperaturas llegan a los 5°C, la planta también puede sobrevivir, pero es importante estar atentos a los cambios y asegurarse de que la planta no se exponga a temperaturas más bajas. Es importante que la planta no se descongele lentamente, ya que esto puede causar mucho daño.
Otra forma de proteger la Clematis florida del frío en invierno es cubrirla con mantillo o una capa de hojas secas para mantener el suelo a su alrededor caliente y protegido. También se recomienda evitar podar las ramas muy temprano en el otoño, para que las ramas más viejas puedan actuar como abrigo natural.